LOS CRUTTIS, Pancito de leche y miel de abejas

Vierta la leche en el tazón de una batidora, agregue la levadura y la miel y mezcle con el batidor durante unos 30-40 segundos, hasta que la levadura se haya disuelta.

Añade 4 cucharadas de harina y mezcla de 2 a 3 minutos, hasta obtener una mezcla cremosa. Luego, añade el resto de la harina y reemplaza el batidor con el gancho de amasar. Mezcla durante 5 minutos a baja velocidad y luego aumenta la velocidad durante 2 o 3 minutos más para enhebrar la masa, hasta que se despegue de las paredes del bol y se adhiera al gancho.

Añade la sal y sigue amasando un par de minutos a baja velocidad. Luego, añade los 50 g de mantequilla blanda a temperatura ambiente y mezcla durante 7-8 minutos a baja velocidad, hasta que la masa la absorba por completo. En los últimos 30 segundos, aumenta la velocidad para que la masa adquiera su consistencia final.

Transfiera la masa a una superficie de trabajo, recójala con un cortador de masa y dóblela sobre sí misma 5 o 6 veces con las manos. Forme una bola y déjela reposar 3 horas a temperatura ambiente, cubierta con un paño limpio, hasta que triplique su tamaño.

Una vez lista la masa, presiónala con los dedos para eliminar las burbujas de aire. Toma los 50 gramos restantes de mantequilla blanda y extiende un poco sobre la superficie de trabajo y las manos.

Coloque la masa sobre la superficie untada con mantequilla y extiéndala con las manos, intentando darle una forma rectangular lo más uniforme posible (no se recomienda usar un rodillo en esta etapa, ya que la masa tiende a pegarse). Extienda la mantequilla restante sobre la superficie del rectángulo de masa y enróllelo formando una salchicha.

Dobla la salchicha como si fuera una “billetera”, colócala en una bandeja de horno forrada con papel de horno y déjala reposar en el frigorífico durante 1 hora.

Después de reposar, la mantequilla se habrá solidificado. Extiende la masa con un rodillo hasta obtener un rectángulo uniforme de aproximadamente medio centímetro de grosor (puedes colocar la masa entre dos hojas de papel vegetal para facilitar su preparación). Con un cuchillo, corta 10 triángulos isósceles. En el centro de la base de cada triángulo, haz un pequeño corte de aproximadamente 1 cm de largo.

Abre las solapas y enrolla cada triángulo, empezando por la base y avanzando hacia la punta. Dobla las dos puntas ligeramente hacia adentro para darles forma.
Coloca los bollitos en una bandeja para hornear forrada con papel vegetal. Cúbrelos con film transparente y déjalos levar en el horno apagado hasta que doblen su tamaño. (Si preparas una gran cantidad y quieres congelarlos, guárdalos en el congelador antes de levar).

En un bol, casca un huevo y añádelo a los 30 ml de leche. Bate con un tenedor hasta obtener una mezcla homogénea.

Pincele los panecillos con huevo y leche, luego hornéelos en un horno precalentado a 200 °C (400 °F) durante unos 20-22 minutos, o hasta que estén dorados. Retire del horno y deje enfriar antes de servir.